Un proyecto de movilidad sustentable de la EPET N° 21 fue premiado en el concurso Innovar

Un proyecto de la Escuela Provincial de Educación Técnica N° 21 de San Martín de los Andes fue premiado, junto a otras 3 ideas neuquinas, en el concurso nacional de innovaciones, INNOVAR, una iniciativa del ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación que fomenta la innovación y premia a quienes se atreven a inventar, crear y mejorar productos y servicios, a nivel federal.

El proyecto de alumnos de 6° año de la EPET N° 21, a cargo del docente Ariel Pereira, ganó en la categoría de escuelas técnicas y agrotécnicas y se trata de un “vehículo híbrido pedal-eléctrico” no contaminante y respetuoso con el medio ambiente, para utilizarlo en trayectos cortos dentro de la ciudad.

Esta construido por componentes de bicicleta y posee un motor eléctrico y batería que le da una autonomía de 30 kms, el prototipo está en etapa de optimización de su funcionamiento y tienen la idea de adaptarlo para personas con problemas de movilidad y permitir que aquellas personas que están en silla de ruedas puedan pasarse a este vehículo y movilizarse por la ciudad.

En la 18° edición del programa se presentaron más de mil iniciativas. La ceremonia de premiación contó con el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, Daniel Filmus, quien manifestó su “alegría y emoción por lo federal de esta premiación, estamos orgullosos de nuestras escuelas técnicas, porque forman lo mejor de nuestros profesionales, los países que realmente apuestan a la ciencia y la tecnología no están solamente pensando en la producción primaria”.

Otros 3 proyectos neuquinos también ganaron

En la categoría investigación aplicada uno de los proyectos ganadores fue “Nanoarcillas colectoras de hidrocarburos”, de María Eugenia Parolo, de la Facultad de Ingeniería, de la Universidad Nacional del Comahue.

Está en escala de laboratorio actualmente, trabajando en avanzar y escalar a piloto, el proyecto de innovación es para poder recuperar el agua y reutilizarla, pasaría a ser una tecnología complementaria con respecto a las tradicionales que usan los talleres mecánicos o los tratamientos de aguas convencionales, que existen en la industria del petróleo. Es un método que sirve para mejorar o refinar ese tratamiento.

En la categoría alimentos, una de las dos medallas INTA fue para el proyecto de “Levaduras autóctonas para el control de enfermedades de fruta orgánica”, de Marcela Sangorrin, del Instituto de Investigación y Desarrollo en Ingeniería de Procesos, Biotecnología y Energías Alternativas (CONICET-UNCo). Surgido hace 15 años en la Universidad Nacional del Comahue, como una necesidad de los productores de fruta para producción orgánica, donde se necesitaba de una alternativa de control biológico que reemplazara los fungicidas químicos, allí entonces, buscaron una levadura autóctona, seleccionada en laboratorio para después producirla en gran escala para todos los productores de la región.

En la categoría de escuelas técnicas y agrotécnicas, además de la EPET 21, también ganó el “Robot tipo rover multifunción para detección de escape de gases, Roberto", del Instituto Tecnológico del Comahue, de la ciudad de Neuquén.

“Roberto” surgió a partir de una idea en las clases de quinto año del ITC, para poder aplicar la tecnología espacial en la tierra, simulando o intentando replicar los robots tipo rover, el objetivo es que sea utilizado en refinerías, mineras, frigoríficos, estaciones de bomberos y de policías. Está hecho con materiales y equipos disponibles dentro de nuestro país y sirve para la medición de gases en espacios confinados. Mediante una aplicación del celular, puede moverse para desplazarse en un ambiente, incluso en territorios como la barda neuquina.