Por el conflicto bélico, las peras neuquinas y rionegrinas dejarán de llegar a Rusia

Las peras que se producen en el Alto Valle de Neuquén y Río Negro dejarán de llegar a Rusia, como consecuencia del conflicto bélico que mantiene al país con Ucrania. Ante esta situación, los productores ya buscan nuevos mercados.

La devaluación de la moneda rusa (el rublo) hizo que los reembolsos por exportaciones sean negativos y las empresas de la región ya prevén una “temporada negra” en ese destino: están buscando “reorientar los mercados” hacia otros países, en una tarea compleja. En menos de 30 días, se pasó de los 75 a 130 rublos por dólar. Esto se suma a que si cancelan el sistema SWIFT (una herramienta para pagos interbancarios en el exterior) Rusia no podrá comprar dólares para pagar las peras y manzanas a los exportadores de la región.

“Esta guerra que nadie preveía nos agarra de manera sorpresiva y nos crea un problema muy serio. Todas las empresas están viendo cómo atajar este problema y reorientar los mercados”, dijo Agustín Argibay Molina, presidente de la Cámara Argentina de Fruticulturas Integrados (CAFI).

Rusia se consolidó desde hace cinco años como un destino conveniente para las exportaciones de peras y manzanas del Alto Valle. De hecho, el país gobernado por Putin es el segundo mercado más grande para la exportación de estas frutas neuquinas y rionegrinas.

De acuerdo datos del Senasa, el año pasado se enviaron 74.629 toneladas de peras desde las provincias de Río Negro y Neuquén al mercado ruso. Y en lo que va de 2022 ya salieron 10.691 toneladas, de acuerdo a la misma fuente.